Hace tiempo que siento que necesito cambios, que para lo inquieta que yo soy, llevo demasiado haciendo lo mismo. A los 5-6 años de vivir en Madrid siempre busco otro país, pero como ahora no es posible, me he cambiado de casa a una más pequeña, pero con un jardín que Valentina disfruta como loca, y más cerca de Madrid, para que yo me anime a salir de vez en cuando.
Además, como os conté cuando me puse a vender cosas del estudio, también quiero simplificar mi vida y mi trabajo. Y eso me ha llevado a dejar de tener el estudio en casa, y a coger menos sesiones para tener tiempo para pensar y dejarme llevar en lugar de planificar y tener ocupado y apuntado en la agenda cada minuto de mi día. De hecho, quiero usar menos pantallas y desde ayer tengo cuaderno y agenda de papel, porque creo que tengo una enfermedad con el iCal. Todo está ahí anotado en su correspondiente color.
Y dicho esto, os cuento que hasta que no tome una decisión con el tema de la fotografía de recién nacidos en estudio, estoy disfrutando mucho, mucho, mucho de hacer las fotos a los recién nacidos en casa. Porque es algo nuevo para mi, porque muchos padres no tienen energía para salir de casa, porque queremos ese recuerdo de los primeros días en su hogar y porque son más naturales, esto es lo que quiero hacer en estos momentos. Si quieres más información, te cuento por mail o por teléfono!
Os presento a Julieta.
